HISTORIA DE UNA BANDA DE GARAGE
La banda fue formada a mediados de 2009, dos meses después de la despedida de Los Piojos en el Estadio Monumental de River Plate ante 75.000 personas.
Según Ciro, él no quería caer en un estado de "depresión" por la ruptura de Los Piojos, es por eso que junto con el guitarrista Juan Manuel Gigena Ábalos, (guitarrista que también se fue a probar a Los Piojos después de la salida de Pity Fernández) decidieron armar el grupo "Los Persas".
Luego se sumaría "Broder" Bastos, ex guitarrista de Bossan'Stones - Bossa n'Marley y Bossa n'Roses.
La banda tuvo sus primeros recitales en diciembre de 2009 en Rosario y Córdoba.
Los recitales más importantes fueron en 2010, ya con un CD realizado, en el Orfeo Superdomo de Córdoba, en el teatro Ángel Bustelo, de Mendoza,1 en Hugo Espectáculos de San Juan, y en el estadio Luna Park de Buenos Aires.
La banda cambia su formación a partir de 2011, con la salida del tecladista Miguel "Chucky" de Ipola, quien decidió continuar con sus propios proyectos, aunque suele aparecer de invitado; lo reemplaza Diego Mano.
El segundo integrante en alejarse en septiembre de 2011 fue Juan José o "Juanjo" Gaspari quien comentó a través de su Facebook que decidió alejarse por problemas personales, desmintiendo cualquier problema interno con el integrante, y agradeció el apoyo recibido por los fans.
El reemplazante de este sería Rodrigo Pérez, quien fue ayudante de Los Piojos a lo largo de varios años.
En el CD "Espejos" podemos encontrar la siguiente reseña contada por el mismo Ciro:
Esta historia comienza a mediados del 2009 cuando llame al guitarrista Juan Abalos, a quien había escuchado alguna vez y mas había deslumbrado. La música fue siempre la mejor terapia para mí, y no quería entrar en un bajón del que me costara salir por estar mucho tiempo sin ella. Mi banda de 20 años se había disuelto. Si quería sobrellevarlo lo mejor posible debía armar un nuevo grupo que me convenciera, y en lo posible, conmoviera. Juan tiro de movida una primera formación. Músicos que tocaron alguna vez con él. Junto con Chucky en los teclados, arrancamos. Zapamos temas de Pappo, los Stones, y por supuesto de Los Piojos; más algunas ideas que tenía hacía tiempo o lo que se me iba ocurriendo. Lentamente el placer desplazaba a la incertidumbre y la angustia. Mis ganas de comenzar una gira y reencontrarme con la gente eran tremendas. Quería acelerarlo todo para volver. Pero no era tan sencillo.
El violero que Juan trajo tocaba muy bien pero me di cuenta que no era exactamente lo que buscaba. Como pesar hable con él y empecé a probar otros guitarristas. Vinieron muchos y muy buenos. Fue difícil la elección. Quedó Juanjo Gaspari. Por su gusto y talento. Y su humildad. Con Juan se entendieron de movida.
Pero en medio de tanta prueba note que algo en la base podía estar mejor. Don Alfredo Toth me aseguro con oído experto de Broder Bastos, bajista brasilero, lo que deseaba y sospechaba que iba a oír: “Es un bajista de la reputa madre, y toca cosas distintas, por la info que tiene”. ¡Vamos Broder puta qui parió caralho! ¡A gente fica gostosa!
Entonces vino lo mas duro. Cambiar el batero. Sobre todo porque me había caído muy bien. Y empezamos a buscar. Fue larga y difícil la elección. Lulo Isod la rompe. Le pedís, lo toca. Salvo una vez, que le pedí un absurdo intocable. Lo intento tres veces y me dijo: “No me sale”. Lulo quedo en el puesto.
¿Los defectos? Juan toca algo genial y a los once minutos no recuerda lo mas mínimo, Chucky la gasta siempre…y cuando no se quedó dormido en su casa, Juanjo dice haber jugado en las inferiores de Gimnasia pero corre diez metros y se ahoga, Broder hace quince años que vive acá y no se entiende lo que habla, y Lulo directamente no habla. Pero me convencen y conmueven. Tienen una onda alucinante y suenan como la c*** de la lora. “Ciro y la c*** de la Lora” hubiera sido un poco fuerte, así que les puse “Los Persas” .